En la escoba gana la partida el primero que consiga 21 puntos o más (por defecto, según personalización).
El juego se desarrolla en manos en las que se reparten inicialmente cuatro cartas en la mesa y tres para cada jugador. Durante la mano cada vez que los jugadores se quedan sin cartas se reparten tres más a cada uno de ellos hasta que no queden cartas.
Cada jugador juega por turnos. En su turno puede coger cartas de la mesa si junto a una de las suyas suman 15. Si al hacerlo no queda ninguna carta en la mesa el jugador obtiene una escoba. Si no coge cartas debe depositar en la mesa una de sus cartas.
Las cartas del 1 al 7 tienen el valor indicado por el número. La sota (10), caballo (11) y rey (12) valen 8, 9 y 10 respectivamente.
Al final de cada mano las cartas que quedan en la mesa serán para el último de los jugadores que haya cogido cartas.
Una vez finalizada una mano se empieza otra y así hasta que uno de los jugadores obtenga 21 puntos (por defecto) o más y no haya empate (en este caso la partida continúa)
(los puntos se suman al final de la mano):
- Un punto por escoba
- Un punto al que tiene más cartas
- Un punto al que tiene más oros
- Un punto al que tiene más sietes (por defecto) o mejor setenta
- Un punto al que tiene el 7 de oros (también llamado el velo)